El estudiante que aprende a distancia

La metodología para motivar y enseñar a los estudiantes en los procesos desarrollados en entornos virtuales ha de ser diferente de la utilizada en la enseñanza presencial –convencional.  

Además de enfrentarse a un aprendizaje en solitario y autónomo el estudio a distancia es individualizado y personalizado. Lo ideal es que se adapte a las necesidades, características e intereses personales de los estudiantes, y a su disponibilidad de tiempo, espacio, motivaciones, ritmos y estilos de aprender, por lo que la propuesta a cubrir ha de ser flexible y adaptable a estas circunstancias. Pero esta independencia tiene su vertiente negativa, la de la previsible soledad, ansiedad y angustia que puede suponer esa situación, y que el estudiante deberá superar mediante el contacto con el docente-tutor.

Es importante resaltar que la capacidad de aprender a través de esta modalidad no está desarrollada en nuestros actuales estudiantes y no se desarrollará en ellos de manera automática. Por lo tanto, debe brindarse material didáctico adecuado, facilitar diferentes vías de comunicación -entre tutores y estudiantes y estudiantes entre sí-  y utilizar un entorno motivador.

 

Algunas características de este estudiante

 

  • Es un sujeto activo, que construye y atribuye significados, apropiándose de los contenidos de una manera individual.
  • Tiene una forma propia de organización interna (experiencias y conocimientos previos).
  • Tiene un estilo de aprendizaje particular.

 

A su vez, para aprender a distancia, este individuo debe poseer ciertas condiciones:

  • Estructuras cognitivas que le permitan relacionar el nuevo contenido con los saberes previos.
  • Actitud favorable hacia la nueva modalidad propuesta.
  • Distancia óptima entre lo que se sabe y lo que se desconoce.
  • Ayuda y orientación pedagógica que posibilite la integración significativa. En este caso son los docentes-tutores los facilitadores del aprendizaje, que deben motivar y potenciar el aprendizaje independiente y autónomo de los estudiantes, a través de diferentes canales de comunicación.